Esta entrevista ha sido realizada por la redacción de Fes Art News compuesta por Emma, Jhota, Mario y Aiducla.
Dentro de nuestro espacio de entrevistas que como muchos y muchas sabéis podéis visualizar en el canal de YouTube de la escuela, siempre nos gusta hablar con personalidades diversas para aprender y conocer mejor el campo en el que desarrollan su actividad laboral y aprender de sus experiencias.
En este caso hablaremos con el creador de Escola Fes Art: Esteban Cabrera. Músico, pedagogo, profesor y director de la escuela Fes Art. Vamos a profundizar un poco más…
¿Qué significa la música para ti? La verdad es que cuando con cuatro años empecé a recibir clases de folclore (canario) no me imaginaba que la música fuera a formar parte de mi vida. Ni siquiera cuando con siete años comencé mis clases de canto con la tristemente fallecida Doña Pilar Castro Palazón.
Luego ya vino mi época en el Conservatorio. Los primeros años fueron muy bonitos. Recuerdo con una sonrisa aquellos conciertos en donde todos nos reuníamos en el patio central para cantar y tocar en Navidad. Quise hacer canto pero no me dejaban presentarme tan joven. Fue ya de mayor cuando realizaba estudios superiores de piano cuando decidí hacer la prueba de acceso y, finalmente matricularme. Por este motivo se puede decir que estudié piano casi de rebote y por no pasarme años sin tener relación con la música.
Estudiar piano es como una carrera de obstáculos y de mucho fondo. Sin embargo, al final te das cuenta de que todos estos esfuerzos tienen su reconocimiento con el tiempo.
Creo que enseñando es como más se aprende y se aprende mucho de la observación y del intercambio de ideas. Se adquiere una experiencia impagable con los alumnos y alumnas. Tanto los mayores como los más pequeños tienen mucho que ofrecer. Son un torbellino de ideas e ilusiones que no permiten relajarte sino dar lo máximo de ti constantemente.
Y, ¿qué significado debería tener la música en una sociedad como la actual, que valora tan poco la educación y mucho menos la artística? La música, así como el conjunto de las demás artes, son una herramienta muy efectiva que va calando en el alma de las personas y que luego nos dota de una sensibilidad especial.
En la escuela debemos aprender muchas materias. Materias que son muy importantes para la vida y para nuestro futuro profesional, pero ¿quién cuida el alma de una sociedad? Relegando a un segundo plano tanto a la música, la filosofía, el teatro, etc., ¿estamos creando una sociedad mentalmente sana y capaz de comprometerse con los problemas que en ella existen?
En este sentido, ¿Qué ideas y acciones deberían cambiar en el ámbito social para una mejor concepción, aceptación y disfrute de esta disciplina en España? Me parece especialmente interesante que el debate se centre en qué puede hacer la música y los músicos por la sociedad.
Y en ese ámbito de una manera modesta nosotros también tenemos en marcha varias iniciativas. Recogemos instrumentos musicales en buen estado que no se utilizan para que otros puedan aprovecharlos, apoyamos económicamente a asociaciones para que puedan tener instrumentos musicales y así ayudar a niños y niñas con discapacidad y distintas colaboraciones con ONG’s y organizaciones sociales que atienden a la diversidad. Me parece necesario que exista una trama de asociaciones y colectivos que junto con la Administración hagan llegar la cultura y la educación a todos los sectores de la sociedad.
Pasemos ahora al ámbito de la enseñanza. Como pianista y pedagogo, ¿cuáles son tus ideales en el campo de la enseñanza musical? Debemos ser capaces de formar personas. No me considero pianista, ni cantante, ni mucho menos empresario. Me considero educador. Es necesario comprometerse con la vida. No entramos en una clase, damos la lección, cobramos a final de mes y listo.
Hoy en día las necesidades afectivas son muy grandes en niños y niñas. No somos conscientes de cuánto, hasta que lo vemos ni tampoco somos capaces de aprenderlo si no es a través de las experiencias del día a día. A partir de ahí ya viene la educación y todo lo que nos han enseñado en nuestros conservatorios y universidades. Sin embargo, yo me identifico con el maestro de primera enseñanza. Me identifico con ese profesional nunca bien valorado que enseña el amor por la música y que alimenta cada día esta pasión. Esos son mis valores. Me identifico con una sonrisa, con una palabra y con un dibujo, con un gesto y una actitud.
A la vista de todo lo anterior, y ya por último ¿cómo ves el futuro educativo de este arte en España? Creo que en España hay mucha gente válida que se busca la vida para avanzar, aprender y desarrollar sus cualidades paralelamente a las aulas regladas. Creo que dentro de cada aula muchos profesores y profesoras proponen un desarrollo curricular más personalizado. El interés por el cambio pedagógico es cada vez mayor.
Creo que el futuro del Arte en general tiene que pasar por la convergencia de todas las disciplinas. En primer lugar, por una cuestión de lógica económica. Quien tiene una modesta productora de teatro necesita saber no sólo de interpretación sino de maquillaje, iluminación, escenografía, música, etc. No es posible contratar a tanta gente para una obra de teatro de pequeñas dimensiones. Y en segundo lugar, porque de una manera romántica si se quiere debemos tender al ideal renacentista en el que el Hombre debe aspirar a conocer todo el Saber Humano y está constantemente aprendiendo y necesitado de conocimiento.
